Estos son los dos elementos que mis hijos aman.
Les encanta manipularlos.
A mí me encanta acompañarlos en esos momentos. Se concentran y empiezan a trabajar con la imaginación. Fabrican montañas, ríos, volcanes, presas, puentes,…
Pienso que es muy importante que trabajen con estos dos elementos. Siempre buscando soluciones. Ellos mismos han buscado la manera de tener agua en su arenero. Colocan depósitos para recoger las aguas de las lluvias. Colocan mangueras, para que el agua de la alberca les llegue hasta el lugar que quieren. Las van poniendo dentro de depósitos para tener más presión. Y mil ideas que contagian allá donde van.
Es maravilloso.